viernes, 19 de agosto de 2011

¡No van a cambiar!

¿Por qué insistimos las mujeres en quejarnos por que los hombres son inmaduros? Quisiera que alguna mujer me responda si alguna vez conoció a un hombre maduro. Me encantaría saber si en realidad existe ese hombre (que en mi opinión sería similar a dios mitológico) para ir a secuestrarlo, hacerle un estudio de ADN, producir alguna suerte de medicamento que permita que el cerebro de ellos funcione más como nosotras quisiéramos o hacer videos con instrucciones tipo “do-it-yourself” en los que aprendamos como modificar las conductas masculinas que nos sacan de quicio.

 Claro que las mujeres que crecimos jugando “a las princesas”  no somos culpables que nos hayan metido en la cabeza que lo único que importaba era estar con un príncipe para casarse y “ser felices para siempre”. Ahí debe estar Walt Disney con una sonrisa de oreja a oreja en su cámara de crio preservación esperando “revivir” para escribir más películas que deriven en adultas con una imagen irreal de las relaciones de pareja. A pesar que muchos digan que lo de W. Disney es un mito a mí me queda la duda, una persona capaz de inventar personajes tan falsos es capaz de mandarse a congelar!

Si mi estimable lectora aún se pregunta el por qué de mis palabras, evidentemente nunca se ha sentado a analizar (ahora en su edad adulta con un poco de experiencia en lo que a relaciones de pareja se refiere) a aquellos hermosos y cuasi perfectos hombres que nos “vendieron” siendo niñas. Como un pequeño ejercicio, permítanme ejemplificarles a continuación a qué me refiero:

1.                   Príncipe Ferdinand (Blanca nieves y los 7 enanitos –¿cumplirían con la ley de la “L” los enanitos?) o como me gusta llamarlo “Ferdi el acosador” : este príncipe hace aparición en la película cuando trepa un muro e invade el castillo donde vive Blanca Nieves por que la escuchó cantar y le pareció adecuado (ojo, se supone que los príncipes eran educados) allanarle la morada a la pobre chica pálida. El tipo llega, B.N. se mete despavorida dentro del castillo y él, muy tranquilo, se pone a cantar. Como buen hombre, se desaparece toda la película y al final el muy necrófilo se la “apreta” mientras todos debaten entre si estará dormida para siempre o si estará ya “medio muerta”.

2.                   El príncipe Encantador (Cenicienta): a este personaje, el Rey lo presiona para que se case y le dé nietos, él tiene un salón lleno de mujeres desesperadas por ser reinas, pero en lugar de fijarse en las mujeres educadas, de buena familia, con buenas costumbres, etc ; él se fija en la “corriente” (lo siento, pero esto parece culebrón mexicano) y lucha por encontrar a la dueña de aquel zapato que dejara perdido el día de la fiesta hasta dar con ella y casarse. Moraleja: lo importante es que el príncipe te traiga ganas y que sepas limpiar y cocinar para llegar a ser una reina.

3.                   El Príncipe Felipe (La Bella durmiente): este príncipe es tan cliché que aburre, resulta que toda la vida estuvo comprometido con la Princesa Aurora y sabía que tenía que casarse con ella, se va a pasear un día por el bosque y se liga a una chica que cantaba con pájaros, la invita a reunirse en la noche en un cabaña (SOS un sinvergüenza Felipe: estas comprometido!!!), al final por las cosas de la vida se entera que la Bella Durmiente es en efecto Aurora y el muy desgraciado que le iba a poner los cuernos a la prometida sale ganando.

4.                   El Príncipe Erick (La Sirenita): de este personaje no hace falta hablar mucho, él se enamoró de la voz original de Ariel y por un hechizo y pleitos de mujeres desesperadas casi se casa con Úrsula; en resumen, Erick “el superficial” solo quería que le cantaran bonito.

5.                   Aladdin. Toda una novedad: un hombre inseguro!  El, creyéndose muy inteligente se hizo pasar por Príncipe para enamorar a Jazmín. 

Eso sí, he de admitir que de todas las películas, la única que es directa en abordar las típicas conductas masculinas es La Bella y la Bestia: la Bestia trataba mal a Bella, pero claro, cuando ella se hartó de sus maltratos y su amargura, agarro sus cosas y se fue; él la valoró por primera vez, salió a buscarla, la rescató de la manada de lobos y se enamoraron: ¿les suena conocida la historia?... Lo triste es que el feo de Disney es el único que nos muestra como son los hombres abiertamente y sin trucos ni sutilezas.

            Nada justifica que en estas películas le hayan dado tan poca importancia a las actitudes negativas de los hombres. Alguna vez analizaste que ninguno de los príncipes trabajaba, las mujeres estaban a disposición de ellos 24/7 y eran totalmente superficiales… Ahora que has podido ver a los príncipes con los que soñaste toda tu vida desde otra perspectiva: aun crees que un hombre va a madurar?